LA. GRAN FARSA DE LA “VENIDA DE CRISTO”. Por Carlos Garcés.
Durante siglos, las religiones nos han repetido el mismo disco rayado: “Cristo volverá”, “el fin del mundo está cerca”, “preparaos para el Juicio Final”. Generaciones enteras han vivido con ese miedo metido en la cabeza, como si la espada del Apocalipsis estuviera siempre a punto de caer. Y, sin embargo, nunca pasó.
Como he dicho infinidad de veces, el verdadero fin del mundo y Juicio Final no es colectivo ni apocalíptico: el fin del mundo llega para cada persona el día en que muere. Ayer fue el fin del mundo para miles de Seres Humanos, hoy lo será para otros, y mañana lo será para nosotros. Esa es la única certeza. Lo demás, es un cuento chino inventado por las religiones mundiales para domesticar a la gente.
Este mito de la “segunda venida” no es solo un engaño inocente, es un cuento criminal. Sirve para mantener a los pueblos en la pasividad, resignados, sin rebelarse contra las injusticias. Mientras los poderosos aplican sus barbaridades, y atrocidades a la descarada desde hace más de cinco años con la criminal y genocida AGENDA 2030, las masas permanecen quietas, entre otros motivos, porque les dicen: “No te preocupes, Cristo volverá y pondrá orden”. Es la coartada perfecta para que el mal avance sin rebeldía.
El miedo ha sido siempre el arma de las religiones: miedo al infierno, miedo al fin del mundo, miedo a la condena. Y el miedo paraliza. Con la excusa del “Juicio Final”, han conseguido que millones de personas acepten su papel de ovejas obedientes, incapaces de levantar la voz frente a los abusos.
Jesús de Nazaret existió y predicó un mensaje de vida, de justicia y de valentía y se enfrentó al mal REBELÁNDOSE Y LUCHANDO CONTRA ÉL. Pero las iglesias, hoy todas ellas criminales, lo traicionaron, lo convirtieron en un eslogan de obediencia, en una excusa para el conformismo. En lugar de invitar a vivir con coraje y combatir al mal, nos han dicho, “Cállate, no luches, espera la venida”.
La llamada “venida de Cristo” es, en realidad, una herramienta de sometimiento de las masas. Un mito diseñado para anestesiar conciencias, para adormecer pueblos enteros y para impedir que los hombres y mujeres libres se enfrenten al mal real que tienen delante.
18 de septiembre de 2025.
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