Como bien sabéis desde hace más de cinco años y medio vengo defendiendo públicamente la abstención en las elecciones como parte de esa rebeldía y desobediencia civil tan necesaria.
Precisamente en uno de mis varios artículos concretamente del año 2019 escribí uno que llevaba el mismo título que el que me ocupa hoy, URNAS VACÍAS, y cuyo link dejo abajo.
En dicho escrito manifestaba una vez más que la solución a los problemas que entonces tenía España y que llevábamos varios años arrastrando no se resolvían votando y comentaba que en un Estado en el que no rige lo fundamental, LA CARTA MAGNA, votar de nada sirve aparte de legitimar ese sistema corrupto.
Y ello era así porque aquellos que tenían el poder y la autoridad no cumplían ni hacían cumplir esa Constitución y al no cumplirse la "Ley de leyes" los ciudadanos dejan de ser iguales ante la ley. Por lo que acudir a las urnas para asentar ese sistema no tenía sentido alguno.
Pues bien hoy, cuatro años después, esas palabras no sólamente continúan plenamente vigentes sino que la situación es muchísimo más grave y peor que la de entonces al haberse convertido el Estado español en genocida, a sueldo de la criminal agenda 2030.
Hace tan solo cuatro años quién se hubiera imaginado lo que hemos vivido desde el 14 de marzo de 2020, día en que se empezaron a traspasar como nunca ha sucedido en la historia de España y a la descarada, todas las líneas rojas habidas y por haber.
Y lo peor de todo es que ninguno nos hubiéramos imaginado que a fecha de hoy la práctica totalidad de los españoles, por acción y por omisión, estuvieran obedeciendo, acatando, sirviendo y siendo sumisos sin oponer resistencia alguna y sin combatir y eliminar a ese mal.
Este año volvemos a tener una ocasión de oro para demostrar a todo el sistema, no solo corrupto sino también criminal y asesino, que los españoles tenemos dignidad y que no se van a salir con la suya. Y una prueba de ello sería la ABSTENCIÓN en las votaciones y que ésta fuera la que ganara todos los comicios previstos.
A ver si aprendemos de una vez la lección.
Carlos Garcés.
12 de marzo de 2023.
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