A medida que nos aproximamos a las elecciones es escandaloso observar como la gente se va ablandando y va a acudir a votar por aquello del mal menor, el voto útil y otras estupideces.
Ya tendríamos que haber aprendido algunas lecciones y sobre todo cuando unos pocos llevamos unos cuantos años recordando que los problemas que tiene España no se resuelven ni en las urnas ni en los tribunales de justicia.
Luego que nadie se queje. Entre los que votan, los que callan, los comediantes y folclóricos y los que no defienden públicamente la abstención, han convertido a España en un estercolero.
Carlos Garcés.
9 de mayo de 2024.
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