"Aprende a tomarte en serio a vos mismo y a mandar al diablo a los demás". De redes.

De redes:

"Vos naciste en una sociedad que es parte de una sociedad incluso más grande globalmente. 

Se te impusieron reglas y un "contrato social" sin saber si ese contrato tenía algún beneficio para vos. 

Y se te hizo seguir ese camino, incluso si la sociedad parecía actuar de formas dementes en puntos. Y cuando crecés, la misma sociedad puede abandonarte para morir sin pensarlo dos veces, si no lo hizo antes. 

Entonces, ¿por qué tuviste que seguirle el juego a la sociedad con todas sus locuras? Por ninguna razón real. Solo te forzaron a hacerlo. Te hubieran abandonado antes de no hacerlo. Pero, si querés ser libre de su enfermedad grupal, te abandonarán tarde o temprano. 

La psicosis masiva que hace que vean la realidad con extrañeza te separará de ellos. Incluso si existen en el mismo plano físico, no existirán en el mismo plano mental y eso ya crea una diferencia que quizás nunca se pueda superar. 

La mayoría vivirá atrapado en esa psicosis hasta su final. 

Si querés algo más, primero tenés que hacerte dueño de tu propia cabeza. 

Te pueden quitar todo lo demás y te lo pueden quitar con facilidad. Pero, solo si sos dueño de tu propia cabeza eso se vuelve mucho más complicado para otros. Porque es mucho más difícil usarte y robarte.

Serás una persona, en el genuino sentido de la palabra. 

No hay nada que quieran menos las personas que quieren manipularte, por eso intentarán popularizar la estup*dez y la ignorancia. 

Por eso la sociedad se volverá una sociedad del ridículo, donde todos se ríen de otros, mientras todos hacen ridiculeces. 

Aprende a tomarte en serio a vos mismo y a mandar al diablo a los demás. Porque solo las personas que realmente puedan hacer eso quedarán. 

Todos los demás serán iguales que un animal que va al matadero."

“No es el hambre, ni los terremotos, ni los microbios, ni el cáncer, sino el hombre mismo el mayor peligro para el hombre, por la sencilla razón de que no existe una protección adecuada contra las epidemias psíquicas, que son infinitamente más devastadoras que las peores catástrofes naturales.” -Carl Jung-.