Si bien tenía claro que la abstención volvería a perder en estas elecciones, albergaba la esperanza de que un milagro sucediera. Tonto de mí. Será por aquello de que la esperanza es lo último que se pierde.
Ya es tarde para todo.
Preparémonos para lo que viene.
SÁLVESE QUIEN PUEDA!!!
Carlos Garcés.
24 de julio de 2023.
Tenía la esperanza de que la gente se hubiera convencido de que las votaciones no servían para nada , tendría que haber habido una gran abstención y por desgracia así no ha sido . El verdadero problema que tenemos es la agenda 2030 , si no somos capaces de defender nuestra libertad que es lo más valorado que tenemos , luego no nos quejemos de lo que nos espera
ResponderEliminarQue Dios nos pille confesados , no seremos dueños de nada y viviremos como auténticos robots .
Lamentablemente así es.
EliminarEsa es la realidad.
Un saludo.