Escrito en Junio 2020
¡¡¡¡¡¡NO A LA TELEMEDICINA!!!!!
(Ahora en vez de 4 meses llevamos 40 meses)
La llamada Atención Primaria, a la que dediqué casi toda mi vida profesional, ha desaparecido.
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Me estoy aguantando...¡Y MUCHO!
¡Llevamos 4 meses SIN ATENCIÓN PRIMARIA!
Eso que hacen de la "telemedicina", eso, es una absoluta vergüenza, y es inaceptable para ningún médico que siga el juramento que lleva implícito su título.
Reconozco que si ahora estuviera en activo hubiera tenido grandes enfrentamientos con la Administración puesto que no habría aceptado en modo alguno esa forma de "trabajar por la salud". ¡Mis pacientes eran lo más importante! ¡Antes que mi propia salud!
Hace un par de años escribí...
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La anamnesis y la heteroanamnesis, del griego (recolección), es para mi y de manera indiscutible tras 41 años de experiencia médica, lo más importante en una buen consulta. Por supuesto apoyada en una exploración adecuada. Hoy en día, y sobre todo en las Urgencias, se pasa demasiado por alto esta cuestión, pasando inmediatamente a la petición de pruebas, algunas muy caras y otras innecesarias. El médico debe de ser un buen detective de la salud, recopilar datos con TODO DETALLE, tanto en el paciente como en los familiares. No hay que pedir jamás pruebas para corroborar "primeras impresiones" ya que eso es un gran error. El diagnóstico basado en una primera vista, es muchas veces acertado en médicos con mucha experiencia, pero se corre el riesgo de mirar sólo en una dirección y equivocarse. Desconfiad del médico que pregunte poco y no os mire a la cara, igualmente del que rara vez os haga sentar o tumbar en la camilla para poder exploraros con detenimiento.
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Sin tener en cuenta el efecto beneficioso que a muchos pacientes les produce la presencia cercana de "su" médico, la confianza que les da, incluso el efecto placebo que sienten al sentirse apoyados, incluso con una sonrisa o una pequeña carantoña...
No hay que ser médico para saber que es IMPOSIBLE auscultar, por ejemplo, el sistema cardiorespiratorio, sin que esté el paciente sentado o tumbado a tu lado.
Tampoco es posible distinguir una posible apendicitis o algo peor si no se efectúa una meticulosa palpación del abdomen.
Y no hablemos de un posible tumor incipiente de mama.
Es imposible distinguir una posible pielonefritis de un lumbago, sin una puñopercusión.
Y así cientos de situaciones.
Repito...
¡ES UNA ABSOLUTA VERGÜENZA! Y los Colegios de Médicos, y muchísimos profesionales, tragando con todo.
Eso sí; con su silencio permiten, por ejemplo, que centenares de miles de ancianos con EPOC paseen acalorados a más de 30 grados por nuestros parques y playas. Lo hacen asustados por la televisión, y amordazados con unos bozales que encima se pagan ellos. Ayer al menos, tuve el placer de convencer a uno de ellos, con un evidente enfisema pulmonar, para que no pusiera más dificultades a su escasa capacidad respiratoria y disfrutase de la brisa del mar.
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