El valor infinito de las buenas obras. Miguel de Unamuno.



Debe hacerse el bien no sólo a pesar de que no nos han de corresponder en el mundo, sino precisamente porque no han de correspondérnoslo. El valor infinito de las buenas obras estriba en que no tienen pago adecuado en la vida y así rebosan de ella. La vida es un bien muy pobre para los bienes que en ella cabe ejercer.


Miguel de Unamuno,

Vida de Don Quijote y Sancho, XXII



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