Los laboratorios de ingeniería social preparan sus arsenales para desarmar anímicamente a los potenciales disidentes.
EXPERIMENTO
Los laboratorios de ingeniería social preparan sus arsenales para desarmar anímicamente a los potenciales disidentes.
Cuentan con el apoyo de sus "expertos" y sus universidades.
La Universidad de Yale lleva a cabo un estudio (en 4.000 personas) sobre la efectividad de los mensajes para lograr que las personas se vacunen contra el COVID.
He aquí algunos ejemplos:
“imagine la culpa que sentirá si no se vacuna y propaga la enfermedad”.
“quien rechaza la vacunación no comprende cómo se propagan las infecciones o ignora la ciencia".
"aquellos que optan por no vacunarse contra el COVID-19 no son valientes".
Sus resultados influirán en el mensaje dirigido a aquellos funcionarios e instituciones que han rebatido la obligación de la vacunación y las campañas publicitarias en torno a la vacuna. (leer más...).
Cuando el marketing del producto esté acabado, sus medios de comunicación se ocuparán del trabajo sucio.
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No te confundas.
Hablamos de la batalla del bien contra el mal.
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