De hecho, ese es el problema de la humanidad, que las personas no se mueven. Solamente hablan y se quejan entre sí, sin ningún tipo de compromiso con la sociedad a la que pertenecen, como si hubieran venido a este mundo simplemente como espectadores, sin ninguna obligación moral de contribuir en la lucha contra la iniquidad y corrupción. Esperan, en el mejor de los casos, que otros hagan la faena. Pero muchas veces, critican el valor de quienes lo hacen. Un valor que ellos no tienen, o no quieren desarrollar.
Y difiero del calificativo de "buenos" que Martin Luther King otorga a los débiles, o cobardes, o desinteresados o mediocres, que contribuyen a los males a los que nos enfrentamos.
Hay muchos "buenos" que no van a ninguna parte. Lo que hace falta son 'JUSTOS'
Ya mencioné en otra ocasión el castigo mencionado en la Biblia para los que no son ni fríos ni calientes, sino tibios.
De hecho, ese es el problema de la humanidad, que las personas no se mueven. Solamente hablan y se quejan entre sí, sin ningún tipo de compromiso con la sociedad a la que pertenecen, como si hubieran venido a este mundo simplemente como espectadores, sin ninguna obligación moral de contribuir en la lucha contra la iniquidad y corrupción. Esperan, en el mejor de los casos, que otros hagan la faena. Pero muchas veces, critican el valor de quienes lo hacen. Un valor que ellos no tienen, o no quieren desarrollar.
ResponderEliminarY difiero del calificativo de "buenos" que Martin Luther King otorga a los débiles, o cobardes, o desinteresados o mediocres, que contribuyen a los males a los que nos enfrentamos.
Hay muchos "buenos" que no van a ninguna parte. Lo que hace falta son 'JUSTOS'
Ya mencioné en otra ocasión el castigo mencionado en la Biblia para los que no son ni fríos ni calientes, sino
tibios.
Yo misma